miércoles, 3 de febrero de 2016

191. QUE NO SOMOS UNA SECTA, NO JODA!

Estas fueron las palabras de una hermanita testigo con la que alguna vez salí a predicar. Lo curioso es que precisamente este es el mensaje que se repite en todas las sectas.  Las cuales afirman tajantemente que no lo son.
Veamos algunos ejemplos:

 
 
 
 
Cada vez que le preguntas a un miembro de una secta, si el pertenece a una secta, obtendrás una de las siguientes respuestas.
 
1. No, no somos para nada una secta.
2. La palabra culto puede incluir a cualquier religión, por definición somos un culto como cualquier otra religión dominante.
 
La primera respuesta es una negación total, y es aquella que nace cuando el grupo se compara a si mismo con alguna forma extrema de organización sectaria. Y es cuando la organización señala a otra como un verdadero culto y ella se aparta de la definición porque ella misma es socialmente aceptable y por ende menos extrema.

La segunda respuesta es más sutil. Puesto que existen similitudes entre los temas y prácticas de las religiones dominantes y sus propias doctrinas y prácticas religiosas, los grupos sectarios tratan de incluirse a sí mismos con todos los demás grupos socialmente aceptables mediante la ampliación de la definición de Secta para que su uso sea exclusivo a grupos peligrosos exitentes. Dado que las personas no van a llamar en general a las religiones dominantes Cultos, entonces estos grupos minoritarios sectarios tratan de refugiarse junto con los grupos más ampliamente aceptados.

Cada uno de los grupos anteriores sostiene que su receta espiritual particular es la única que puede traer la verdadera felicidad y la salvación. Mirarán hacia fuera en las doctrinas y  prácticas de las demás y no dudarán en llamar a las otras entidades "una secta" - sin embargo, cada uno niega que es una secta.

Por esta razón, el término "Secta" es muy poco útil. Me gusta como suena, pero a veces no ayuda.

En cambio, si se puede cambiar el debate para definir las enseñanzas y las políticas que sirven para imponer un control inmerecido, ilegítimo y poco ético sobre los miembros - Usted puede comenzar a hablar de las partes problemáticas con los miembros del grupo y ayudar a identificar las malas prácticas y rechazarlas.


"Cuando están prohibidos nuestros propios pensamientos, cuando nuestras preguntas no están permitidas, cuando nuestras dudas son castigadas; cuando se censuran nuestros contactos y amistades fuera de la organizaciónnosotros estamos siendo abusados para un fin que nunca justifica los medios.
Cuando nos duele el corazón sabiendo que hemos hecho amistades y que nuestros registros adjuntos secretos serán prohibidos para siempre si nos vamos, estamos en peligro.
 Si tenemos que permanecer en un grupo porque no podemos soportar la salida, la decepción y la tristeza que nuestra salida causará en nosotros mismos y en los que hemos llegado a querer, estamos en una secta. "
---- Deborah Laytonsobreviviente de Jonestown. (Del libro: Veneno seductor, página 299. Anchor Books, Nueva York, 1998)
 
 

 
 
 
 

4 comentarios:

  1. No hay religion que no sea secta, todas, de un modo de otro fomentan el funadamentalismo... Todas son integristas. Lo bueno es que ninguna de estas religiosectas puede cambiar su historia, es por eso que urgando en su pasado puede uno dejarlas al descubierto.

    Viva la ciencia!...

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  2. Las alegaciones de los dirigentes de los TJ de que no son una secta resultan fallidas por las siguientes razones entre otras. NO ES CIERTO que sigan los postulados del cristianismo primitivo porque se bautizan en el nombre del Señor Jesus conforme a la version de las enseñanzas de los TJ. NO ES CIERTO que sean una religion antigua porque surge con la publicacion de la primera Atalaya en 1879 y se ha racterizado por sus falsas prfecías sobre el fin (1914, 1925, 1975, 2014).NO ES CIERTO que se les conozca como benefactores humanitarios porque su fin principal es vender literatura religiosa, PERO NO PROMUEVEN NINGUNA FORMA DE AYUDA HUMANITARIA EFECTIVA.Son promotores de construcciones religiosas de las que se apropian ilegalmente, mediante el uso de mano de obra gratis de sus adeptos. Finalmente son una sociedad anonima supuestamente sin fines de lucro, pero propietarios de un inmenso activo inmobiliario, obtenido mediante el trabajo esclavo. Finalmente invalidan el sacrificio de Cristo, al predicar como sacrificio valido el de la persona que se niegue a recibir transfusiones de sangre. Fray Junipero.-

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